sábado, 10 de agosto de 2013

En el Reino de la Tranquilidad

La ayuda más grande para la vida espiritual es la meditación. En la meditación nos despojamos de toda condición material y sentimos nuestra naturaleza divina. Al meditar no dependemos de ninguna ayuda externa. El roce del alma puede pintar los colores más brillantes aún en los lugares más sucios, puede derramar una fragancia sobre las cosas más viles, puede convertir lo malvado en divino, quedando borrada toda enemistad, todo egoísmo. Cuanto menos se piensa en el cuerpo, mejor. Porque el cuerpo nos arrastra hacia abajo. El apego, la identificación nos hace miserables. Este es el secreto: Pensar que soy espíritu y no cuerpo, y que el universo entero, con todas sus relaciones, con todo su bien y todo su mal es solo una serie de pinturas –escenas en un lienzo- de las cuales soy testigo.



Swami Vivekananda
La Meditación de acuerdo
Al Yoga y al Vedanta
Editorial Hastinapura

miércoles, 7 de agosto de 2013

El Ta-Hio o la Gran Ciencia

1. Los objetivos básicos de la Gran Ciencia o filosofía práctica consisten en el cultivo de la naturaleza racional que todo hombre recibe del cielo, en la educación y renovación de los pueblos, y en la búsqueda del bien supremo o fin último al que debemos dirigir nuestras acciones para alcanzar la perfección.

2. Ante todo es preciso conocer el fin hacia el que debemos dirigir nuestras acciones, es necesario descubrir nuestro destino, para poder tomar la firme determinación de dirigirnos hacia él.Una vez tomada esta determinación, nuestro espíritu se verá libre de toda vacilación e inquietud. En cuanto se haya consolidado esta serenidad y tranquilidad de espíritu gozaremos de una profunda paz interior que ningún acontecimiento podrá alterar. Cuando gocemos de esta paz inalterable, estaremos en condiciones para meditar y para penetrar en la esencia de todas las cosas, habremos alcanzado el estado de perfección que nos habíamos propuesto.

3. Todos los seres de la naturaleza tienen una causa y producen efectos; todas las acciones humanas se fundan en unos motivos y dan lugar a unas consecuencias. El conocimiento de las causas y de los efectos, de los motivos y de las consecuencias, constituyen la raíz del método racional con el que se alcanza la perfección.

    
4. Los antiguos príncipes, que pretendían educar y renovar a todos los pueblos, se esforzaban primero en gobernar con rectitud sus propios reinos. Para gobernar rectamente sus reinos, se aplicaban ante todo en ordenar bien a sus familias. Para ordenar bien a sus familias, procuraban previamente a sí mismos. Para corregirse a sí mismos, ponían un especial cuidado en adornar su alma de todas las virtudes, se esforzaban en conseguir la rectitud y sinceridad de todas sus intenciones. Para lograr que sus intenciones fueran rectas y sinceras, se entregaban con ardor al perfeccionamiento de sus conocimientos morales. Y el máximo perfeccionamiento de los conocimientos morales consiste en penetrar y descubrir los móviles de las acciones.

5. Si alcanzamos un conocimiento claro y profundo de los móviles de las acciones, obtenemos con ello la máxima perfección de nuestros conocimientos morales. Cuando se alcanza la máxima perfección de los conocimientos morales, inmediatamente todas las cosas son rectas y sinceras. Si las intenciones son rectas y sinceras, el alma queda adornada con todas las virtudes. Las virtudes del alma mejorarán y corregirán todo nuestro ser. Si alcanzamos nuestra perfección personal, quedará establecido el orden en nuestra familia. Si la familia está en orden, el reino será rectamente gobernado. Y cuando todos los reinos son bien gobernados, el mundo entero goza de paz y armonía, siendo renovados y educados todos los pueblos.

6. Desde el hombre más noble al más humilde, todos tienen el deber de mejorar y corregir su propio ser. El perfeccionamiento de uno mismo es la base de todo progreso y desarrollo moral.

7. Sería contrario a la naturaleza de las cosas el que produjeran los mismos efectos en estado de desorden y confusión, que organizadas y sistematizadas. Por consiguiente, ha de evitarse siempre el tratamiento superficial de lo más importante subordinándolo a lo que es secundario: jamás hemos de tratar con seriedad lo secundario, anteponiéndolo a lo principal y más importante.


Los Cuatro Libros Clásicos
Confucio
Ediciones B.S.A.

  

sábado, 11 de mayo de 2013

Hoy Tenemos Que Dar las Gracias

Hoy tenemos que dar las gracias

Gracias a quien nos permite disfrutar de un nuevo día
Gracias, porque tenemos la alegría y la tristeza
El optimismo y el pesimismo,
Porque podemos estar contentos ó enojados,
Por el poder de discernir y de elegir,
Porque en nosotros consiste y solo en nosotros
Encontrar los alicientes.

Ser felices debe ser nuestra meta
Y luchar contra quienes se opongan,
Para un sueño adusto . . . una sonrisa

Quitar la careta,
y descubrir la verdadera cara de la gente
Enseñar a quien no sepa,
Que la felicidad. . . es gratis,
Que no hay riqueza que valga,
Si se es pobre de corazón,
Que la pobreza vive
Mientras no nace el amor

Gracias por la vida,
Gracias a ti,
Como te llames señor
Que de cualquier forma
Eres el mismo

Héctor Lama Yazbeck

viernes, 10 de mayo de 2013

Ley de Atracción

La Ley de Atracción te proporciona siempre la esencia de tus pensamientos. Sin Excepción. Consigues aquello en lo que piensas, te guste o no. Con el tiempo y con la práctica, llegarás a tener presente que la Ley de Atracción siempre es coherente. No te engaña. No te traiciona. No te confunde, pues la Ley de Atracción responde precisamente a las vibraciones que emites. Para muchos, la confusión obedece a que emiten vibraciones sin darse cuenta de lo que hacen. Saben que desean algo específico y que no han obtenido lo que desean, pero a menudo no se dan cuenta de que buena parte de los pensamientos que ofrecen contradicen lo que desean.
Cuando comprendas como funcional tu Guía Emocional, no volverás a ofrecer vibraciones sin saber que lo haces. Y con el tiempo. Adquirirás una conciencia tan clara de tus valiosas emociones que sabrás, en todo momento, si el pensamiento en el que te centras actualmente te acerca o te alejas de lo que deseas. Aprenderás literalmente a -sentir- si te diriges a aquello que deseas, en todos los aspectos.

La base de tu mundo es el Bienestar. Puedes permitir o impedir que fluya a través de ti, pero la base es el Bienestar. La Ley de Atracción dice. Todo lo que se asemeja se atrae. Así, la esencia de aquello a lo que prestas atención se está desarrollando en tu experiencia. Por consiguiente, no hay nada que no pueda ser, hacer o tener. Así es la Ley de Atracción.

Pide y se te Dará
Esther y Jerry Hicks
Editorial Urano

viernes, 26 de abril de 2013

Las Crísis de la Vida


Afrontar la propia muerte es la experiencia definitiva en cuanto a sentirse perdido y solo. Pero los encuentros con la mortalidad no son las únicas ocasiones que se nos ofrecen para examinar nuestras almas. Las oportunidades para vivir más de acuerdo con quienes verdaderamente somos se dan en todos los momentos de nuestra vida, aunque es cierto que unas veces se presentan con mayor claridad que otras. De vez en cuando, todos experimentamos apuros para los que no podemos prepararnos completamente, y a menudo estamos dispuestos a conformarnos con el alivio de la tensión. Cuando lo hacemos, lo único que podemos esperar es volver a la vida de costumbre tan pronto como sea posible. Sin embargo, cuando buscamos un arreglo rápido, nos perdemos cualquier aumento que hubiéramos podido obtener en la conciencia de nuestra identidad.
En cambio, si entendemos cada crisis como una encrucijada, tenemos la posibilidad de convertir la perturbación en un punto de opción. La forma en que nos enfrentamos al desarreglo en nuestras vidas puede determinar cambios decisivos, para bien o para mal. En lugar de cavilar sobre la injusticia de lo que nos ha ocurrido, podemos concentrarnos en nuestra libertad; podemos tratar de aprender lo que nuestra crisis tenga que enseñarnos, y elegir entre las opciones que pueda revelar.
Sheldon Kopp
Al Encuentro de una Vida Propia
Editorial Urano